Canción para dormir - Juan, el de la Manzana

Iba con la mochila a cuestas, el niño tomando atajos

Hacia la escuela

Porque los chiquillos mayores que él

Le golpeaban en la cara

Y le quitaban la manzana

Y él que era más chico, mudo… no decía nada.

Y por eso a las seis de la mañana

Cruzaba corriendo la avenida España

Para evitar a los chicos de la esquina.

Si le encontraban le quitarían la manzana

Que su madre muy querida

Le entregaba para el recreo,

Y él que era muy chico… mudo la recibía

Pero su corazón agradecía y agradecía y agradecía…

Agradecía el peinado con zumo de limón,

Agradecía la camisa blanca recién planchada,

Agradecía los zapatos bien lustrados.

Por eso él corría y corría… y corría

Si mirar la luz roja que le decía: Cuidado Juan.

Y el corría y corría… cuidando la manzana

Escapando de los chicos de la esquina.

Una mañana, como todos los días

El cruzaba la gran avenida

… la manzana rodó unos pasos más allá

Un zapato bien lustrado topó la acera de golpe

A Juan, el de la manzana no se le volvió a ver más.

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Cassette

Laboratorio de las 18:00

Son las 18:53 en el COM5, en el glorioso curso que llevo por segunda COMUNICACIÓN DE DATOS, Kenneth está jugando alphabounce y yo… yo estoy viendo blogs que siempre veo y uno por ahí que parece que desaparecerá (y donde comento: los blogs son como las novias no?).

Hoy, como todos los días que me toca salir de la U a las 21:35 me inunda un miedito pedorro, no sea que me asalten… es que es tan tarde, y yo tan corpulento como para defenderme con un solo puñete (jajajaja que deplorable). Aún así lo que más me preocupa es que tengo tareas pendientes para el curso de hipermedia y practicas 1, y por ahí una justificación de inasistencia por hacerme el chistoso este lunes que pasó (que bonito ir a Pacasmayo después de tantos años, y acompañado jojojo).

Seguro hoy no dormiré mucho que digamos (por las tareas pues) y para colmo mañana entro a trabajar a las 08:00, dicen que llegará una supervisora de Lima (Si señor, es mujer), una supervisora a la que muchos le temen, una supervisora a la que muchos gerentes le temen, una supervisora a la que muchos supervisores le temen… y yo, yo que soy un común empleado me meo parado de tan solo pensar que me estará mirando mientras me desenvuelvo en mi puesto. Ah… suspiraré nomas. Solo espero tener la voluntad de levantarme de la cama muy temprano (Ya sabes, el que madruga…).

Patch Panel a las 19:06, y solo sé que el Ingeniero ha dicho que usaremos el bendito asunto conjuntamente con la roseta que hemos comprado (dos módicos soles señor) y algo escuché con respecto al par trenzado, bueno ya me trencé los sesos. Siento como si me hubiera dopado con cuchumil caramelos de Limón.

Diablos, tengo que mandar un mensaje de texto. Hoy es día (y noche) de actos con voluntad, que chistoso soy.




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el Bidet

Hasta ahora no conoce otro varón que se lave los genitales en el tan olvidado (pero presente) trono, la mayoría lo utiliza para poner la ropa sucia o sencillamente para nada, pero su verdadero uso (para el cual lo usa San) es pues para lavar las parte intimas, parecería que solo deberían usarlo las mujeres, pero los varones también tienen el derecho (es un derecho o una obligación se ha preguntado San mientras espumaba de jabón su velludo perineo un martes por la tarde.)

San considera que los testículos son parte crítica e importante y es por eso que dedica veinticinco minutos exactos en el trato de lavado y enjuague de esta parte de su cuerpo, y para el glande veinte.

San Duich aclara en su libro: “Mi Libro Jamás Publicado” que él no es ni pretende ser metrosexual, es más que él no usa esa palabra dentro de su vocabulario, nada tiene que ver esta palabra con esta clase de cuidado. Es cuestión de limpieza –Dice.

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4 de Septiembre de 1999

A veces, cuando lloro, lloro de una manera descarnada, inhumana – ¿te lo imaginas?-, sino mas bien fría y estéril como si llorar fuera un evento propio de algo innombrable y estéril.

Ayer mis ojos han desbarrancado tantas lágrimas como para formar un océano y la verdad que todo a mí alrededor ha quedado vacío sin algas ni caballitos de mar que adornen mi cuarto.

Ayer mi tía, mi querida tía después de meses de estar en cama murió de cáncer al estómago. Ya había perdido la visión por la enfermedad y su cuerpo era un esqueleto disfrazado de un pellejo que alguna vez en la juventud fue de un color moreno bronceado. Ayer mi tía, mi querida tía fue enterrada en el cementerio Miraflores, y no fui por miedo, y por pena, y por qué no me gusta que me vean llorar.


Ramona

1 de Septiembre de 1999

He de dormir hoy por la noche como todas las noches, esperando que mañana sea mejor que hoy por la tarde, porque por la tarde, aunque no fue peor que hoy por la mañana, fue nefasto que es peor que estar peor hoy a cualquier hora.

He de dormir hoy quizás con la mágica idea de que mañana todo lo de hoy no se le parecerá en nada, con la mágica pena de que aunque ciertas cosas causan dolor, este mismo dolor me dice que soy humana, tan humana como para haber hecho y recibido tanto daño que, más daño hay hoy con todo el peso del daño de ayer, antes de ayer y los días anteriores de hoy.

He de dormir hoy con una pisca de odio en el corazón, un octavo de onza de resentimiento y cien gramos de pena, y todo eso sumado da una tonelada de confusión. He de quedarme dormida lo más pronto posible y despertar lo más tarde posible habiendo olvidado lo más posible todo lo posible al despertar, y ojala sea posible aunque cien toneladas de mentiras digan que todo eso es imposible.

He de dormir hoy cansada y aunque parezca inverso he de sentirme cansada para cerrar los ojos y seguirían mis ojos abiertos, también sé que en algún momento de la noche he de ponerme a llorar y aunque parezca inverso he de sentirme cansada para dejar de llorar y seguiría yo llorando. Y aunque parezca inverso frente a estos dos eventos preferiría estar durmiendo.

He de dormir hoy por la mañana por qué no pude dormir por la noche, esperando que más tarde al acabar la mañana sea mejor que ayer por la tarde, porque ayer por la tarde te llamé por teléfono así como antes de ayer por la mañana y hace varios días por la noche, jamás contestaste y yo jamás colgué hasta que la maquinita del teléfono me recordara el número que tantas veces he marcado hasta incluso hoy por la madrugada.



Ramona

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el sadismo

San podía tener cierta magia, algo medio raro en estos tiempos locos y acelerados donde casi todo es binario (e incendiario). San Duich aveces solía resolver el peor problema a última hora, al último segundo… era como si… disfrutara ser lanzado a patadas frente al escenario y que simplemente improvisara.

En otras palabras, a San Duich D’Quezo le encanta el miedo escénico.

la Vida Cotidiana

San Duich D’Quezo siempre se preocupó mas por ver porno, poco le interesó llegar temprano al trabajo y cumplir con su labor, prefería dedicarse a buscar la ropa apropiada a vestir y aún así siempre vistió mal. Le trajo tantos problemas esa vida cotidiana y absurda que hoy apesta a podrido. Pobre y jodido San Duich.




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Es miedo

Sí, es miedo... ese que te arranca el alma. Es miedo puro, sin disolver, sin marañas... ni arañas.